DÍA DE LA MEMORIA, POR LA VERDAD Y LA JUSTICIA

En relación al Día de la Memoria, la Verdad y la justicia, desde el Instituto San Antonio creemos que toda la historia de los hombres debe ser leída a la luz del Evangelio, a la luz de la promesa misericordiosa de Dios y del camino de este, nuestro peregrinar.

En ese sentido, nuestra tarea de hombres y mujeres de fe es la de ser luz del mundo dando testimonio de vida y esperanza, más aún en la adversidad.

Como dice la exhortación apostólica Evangelii Gaudi al tratar los desafíos del mundo de hoy:

"El miedo y la desesperación se apoderan del corazón de numerosas personas… La alegría de vivir frecuentemente se apaga, la falta de respeto y la violencia crecen, la inequidad es cada vez más patente. Hay que luchar para vivir y, a menudo, para vivir con poca dignidad."

La historia joven de nuestra patria tiene heridas recientes que no terminan de supurar su dolor. Por eso es entendible la expresión que tuvo nuestro Papa Francisco, en un encuentro con Pérez Esquivel, donde dijo: “Hay que continuar trabajando por la verdad, la justicia y la reparación del daño producido por las dictaduras”.

Confiamos en que los caminos insondables de Dios nos conducen a su encuentro y son para su mayor gloria. Entregados a la Divina Providencia aceptamos el desafío de ser pescadores aún en las aguas más turbias y tenebrosas. Ofrecemos nuestro dolor y nuestro cansancio con la alegre esperanza de un mundo renovado por el amor que todo lo sana.

Sostenemos entonces que, abrazados al Dios de la Vida, queremos seguir andando los caminos del Evangelio por más Memoria, más Verdad y más Justicia.

Que brille Dios en nuestra comunidad.

Paz y Bien